sábado, 29 de agosto de 2009

Buenos y malos

Estamos acostumbrados a encontrar en toda historia buenos y malos. Por alguna razón, desde quién sabe cuando, el cerebro se siente cómodo al funcionar así. Los periodistas, políticos, economistas, DTs, jugadores, hinchas, jueces, abogados, etcéteras, funcionamos así.
Las simplificaciones llevan a ver al imperio Inca como pobres tipos arrancados de su vida apacible por los sanguinarios colonizadores españoles.
El imperio era eso: un imperio. Perseguía, torturaba, violaba y asesinaba a sus propios colonizados y entregaba a los dioses o a los caciques a sus chicos y chicas, en rituales que aborreceríamos si sucedieran ahora.
Claro que después vino un hijo de madre más puta que, como los peces que van comiendo al de menor tamaño y se convierten en manjar del más grande, le hizo cosas aun peores, en nombre de otro dios.
Podríamos recorrer así toda la historia y cada situación cotidiana. Veríamos a los que cortan rutas en defensa del campo como pobres gauchos despojados de su pan, su tierra, sus vacas y su soja por un gobierno revanchista e inescrupuloso.
O a un monopolio, como a una pobre empresa generadora de riqueza y empleo perseguida por un gobierno cada vez más revanchista e inescrupuloso.
O, del otro lado, veríamos a un gobierno legítimo y defensor de lo popular asediado por intereses mezquinos y peligrosos que se resisten a perder los privilegios que les da el lado oscuro.
Buenos y malos. Víctimas y victimarios. Es difícil mantenerse al margen. Es tentador ceder a la tranquilidad que nos da encontrar culpables, sea una ex novia, un jefe, un dictador, una brujería, un referí.
Detrás de ese juicio está la tranquilidad del porvenir, un nuevo orden, con un bueno que lo será hasta que se convierta en malo y engendre a otro rival. Dialéctica hegeliana.
Ver las cosas de otra forma es como salirse de la matrix. Cuesta, da miedo e impotencia. Mucha impotencia. No hay buenos ni malos, sino peces que se van comiendo unos a otros hasta que llega la ballena que abre la boca y se devora a todos.
La verdad de la milanesa es poco poética. El mundo está lleno de hijos de puta.

viernes, 28 de agosto de 2009

¡Liberasión!

Sabía que Clarín trabaja sin correctores. ¿Pero ningún amigo de las letras trabaja para la causa nacional y popular?
Estos volantes llovieron ayer en las inmediaciones de la Rosada, cuando Cristina anunció que manda al Congreso la polémica o liberadora Ley de Medios por cadena nacional.
Bienvenida sea la ley, siempre y cuando pueda discutirse y mejorarse.
Pero el tercio que vaya a quedar en manos de cooperativas, por favor, ¡a gente que cepa escrivir!

jueves, 27 de agosto de 2009

viernes, 14 de agosto de 2009

Ay!


Entre esto y lo del fulbo, ya no sé qué pensar.
Bah, mejor no pienso más y me voy a ver a Intrusos, que es más sano que la real realidá.

miércoles, 5 de agosto de 2009

Me quedé con ganas de escribir

- Buenas tardes, licenciado.
- Buena tardes, Esteban. ¿Cómo le va?
- Acándamos... hoy me quedé con ganas de escribir.
- Acomódese en el diván y me cuenta.
- Sí, claro. ¿Qué haría usted si es periodista y se entera de que el gobierno que dice defender a los trabajadores echa a 100 tipos de una empresa estatal y en los telegramas de despido les dice que es por su actividad sindical? ¿Qué piensa, doctor?
- Licenciado...
- Licenciado.
- No importa lo que piense yo, Esteban. Lo que importa es lo que usted piensa.
- Lo que pienso no importa; soy periodista.
- Ajá...
- Cuento cosas, noticias, digamos.
- Me decía que se quedó con ganas de escribir.
- Sí, claro. Le cuento. Hoy, de camino al diario, vi unos carteles por Paseo Colón que acusaban a De Vido de echar a empleados del Correo Argentino, que es del Estado, por actividad sindical.
- Ajá...
- Entonces, llamé a ATE. El abogado de ATE, Matías Cremonte, dijo que los empleados del centro de distribución del Correo en Monte Grande se habían organizado bajo el ala de ATE y empezaron a armar asambleas en reclamo de aumento salarial. Y que eso no le gustó a alguien y, entonces, llegaron los telegramas de despido en los que se mencionaba como causal la participación en las asambleas. "Hay despidos masivos en el Estado por actividad sindical", resumió. Hubo tres tandas de despidos en diez días. Unas cuarenta personas primero, veinte después y otras cuarenta.

- Ajá...
- Llamé a uno de los despedidos, de nombre Pablo Orellano. Él había sido elegido delegado. Orellano me contó que, a mediados de mayo, habían decidido organizar una comisión interna y afiliarse a ATE porque el gremio Foecyt no conseguía un aumento satisfactorio y no los representaba correctamente. Entonces, dijo, empezaron con asambleas y algunas acciones de protesta. Contó que les iniciaron sumario a varios, los jefes los amenazaban con despidos si no se desafiliaban de ATE y que, a mediados de julio, empezaron a llegar los telegramas. "Antes hubo despidos encubiertos, porque era personal contratado al que, sin telegrama ni nada, los echaban. Después nos llegaron las cartas documento, 16 ó 17 habrán sido, a personal de planta de entre 10 y 30 años de antigüedad", contó.
- Ajá..
- Dijo que en los telegramas les inventaron faltas y mencionaron la participación en asambleas. Acusaban a los 16 ó 17 tipos de demorar el envío de 6 millones de cartas. Y que filmaron asambleas con cámaras que habían puesto para seguridad. Después, un escribano certificó la participación en las asambleas. Y que siguieron persiguiendo a sus compañeros.
- Ajá...
- Después llamé a voceros oficiales, como debe ser.
- Claro...
- Desde el Correo dijeron que se trataba de gente a la que no se le había renovado el contrato y de 16 ó 17 tipos a los que se despidió con justa causa. Porque, antes que una empresa estatal, el Correo es una sociedad anónima. Que el ministerio de Trabajo no reconoció a ATE como representación de los trabajadores del Correo, por lo que esa asamblea carecía de validez. Que habían demorado el envío de 6 millones de cartas.
- Ajá...
- Correo está a cargo de un tal Miguel Rossetto, hombre de De Vido. El 99% de las acciones de la sociedad anónima está en manos del Ministerio de Planificación y el 1% restante es de Economía. En Planificación se sorprendieron porque los afiches señalan a De Vido como responsable de esos despidos, que fueron por justa causa y, por eso, sin indemnización, dicen.
- Ajá...
- Y bueno, eso... me quedé con ganas de escribir eso. Me asignaron una columnita de 34 líneas -las conté- para contar todo lo que le estoy contando en todo este tiempo.
- Ajá...
- Me angustió, no sé. Mire si me habrá afectado que ya pasó todo este rato y no le conté mi sueño, doctor.
- Licenciado...
- Licenciado.
- Cuéntelo ahora. Nos queda un rato. ¿Qué soñó?
- Soñé que fui al trabajo y, al llegar, me dí cuenta de que estaba desnudo...

sábado, 1 de agosto de 2009

Diga que uno no es malpensáo...

Inauguróse la 123º Exposición Ganadera en la Rural